10 Remedios para evitar golpes de calor con las altas temperaturas
LOS GATOS Y LAS ALTAS TEMPERATURAS
La subida de temperaturas puede aumentar el riesgo de que nuestros gatos sufran un golpe de calor, por eso es conviene tomar una serie de precauciones para refrescarles. Tenemos que tener en cuenta que, a diferencia de nosotros, los gatos no poseen un sistema de regulación térmico, por lo que no pueden sudar como lo hacemos las personas. Esto quiere decir que un golpe de calor podría provocarles consecuencias graves o incluso letales.
Para entender por qué nuestros gatos tienen más riesgo de un golpe de calor que el que tenemos nosotros, tenemos que tener en cuenta que ellos únicamente son capaces de segregar sudor por sus almohadillas y sólo se refrescarán lamiéndose o jadeando. Por eso, una situación de golpe de calor en un felino puede llegar a provocarle grandes dificultades para regular su calor corporal si se encuentra deshidratado o las temperaturas son muy altas.
Por todo ello, es muy importante que mantengamos en nuestra casa un clima fresco para asegurar que se mantenga siempre cómodo e hidratado. En cualquier caso, síntomas como aumento de la temperatura, excitación nerviosa, jadeos, salivación excesiva, temblor, tambaleo, vómitos, cambio de la coloración de las encías a un tono más oscuro o desmayo, son los síntomas más comunes de un golpe de calor en los gatos. Ante cualquiera de estos síntomas, no dudes en llevar a tu gato cuanto antes al veterinario, para evitar otras consecuencias más graves.
Sube la temperatura... ¿refrescamos a nuestra manada?
Existen varios trucos refrescantes que pueden serte muy útiles para mantenerlos fresquitos. Ningún felino está exento de peligro en verano, sobre todo si se trata de cachorros, gatos ancianos, con sobrepeso, o con algún tipo de enfermedad cardiaca o pulmonar, los cuales tienen aún más riesgo de sufrirlo. Así que no dudes en aplicar todos estos consejos para evitar un posible golpe de calor.
Asegúrate de que siempre tenga acceso a agua limpia y fresca
Es uno de los trucos imprescindibles para mantener a nuestro gato hidratado y fresco. Es importante colocar un bebedero (o varios por la casa) con agua limpia y fresca para que beba a su antojo, y no olvidar revisarlos de vez en cuando para que nunca se quede sin agua. Si la temperatura es muy alta, añade algún hielo para refrescar un poco más el agua, aunque siempre con moderación.
Refréscale con una toalla mojada y fresca
Ya sabemos que la mayoría de gatos odian mojarse directamente con agua, así que una buena táctica para mantenerlos frescos es mojar su pelo con toallas húmedas. Empapa una toalla con agua fría y refréscale con ella. No te dejes ninguna parte del cuerpo. Además de su cabeza, refrescar sus patitas, sus axilas, su panza y debajo de su barbilla va a facilitar que baje su temperatura corporal, y le provocará un efecto refrescante muy agradable.
Deja que juegue con hielo
Prueba a dárselos directamente… si los ve como un juguete con el que entretenerse se refrescará con ellos. El hielo puede ser otro de nuestros grandes aliados para refrescar a nuestra manada los días de calor extremo.
Asegúrale rincones frescos y con sombra en casa
Además del agua limpia y fresca, otro punto importante es que nuestro gato cuente con lugares de sombra en casa. Si no es así, asegúrate de bajar las persianas o echar las cortinas para que no entre el sol directo a casa y tu gato pueda contar con sitios de sombra en los que refugiarse del calor y mantenerse fresco.
Cepíllalo a menudo
Es otra buena forma de ayudarle a combatir las altas temperaturas. Incluso puedes cepillarlo con el cepillo empapando antes en agua, para además humedecer el pelaje. Con esto le ayudaremos a librarse del pelaje de invierno y refrescarse.
Prueba a hacerle un helado
Otro de los infalibles para refrescar a tu gato pueden ser los helados para gatos. Un tentempié muy sencillo de hacer y al que tu felino no se podrá resistir. Simplemente necesitarás tener a mano una lata con su comida favorita, pasarla por la batidora, junto con un poco de caldo de pollo sin sal, meter la mezcla en un molde y al congelador. Una vez congelado, podrás dárselo para que se refresque.
Hazle un hueco cerca del ventilador o del aire acondicionado
Además de su camita, procúrale un lugar de descanso en el que corra el aire colocando otra camita o su caja cerca del ventilador o del aire acondicionado.
Moja sus almohadillas
Las glándulas sudoríparas de los gatos se encuentran en zonas muy concretas, como las almohadillas de sus patas. Así que un buen truco para refrescarle en verano, es mojar sus almohadillas o sus patas con agua fresca.
Hazle un refugio refrescante
Además de procurar que tengan zonas de sombra y una zona de descanso cerca del aire acondicionado o del ventilador en casa, otro buen truco para que pueda cobijarse del calor en esta época del año, es preparar una caja de cartón cubierta con una toalla húmeda. En su interior puedes aprovechar para dejar un calcetín con varios hielos en su interior, creando así un perfecto oasis.
¿Le gustará una piscina de plástico?
Si cuentas con una terraza o jardín, puedes probar a comprar una pequeña piscina de plástico como la de los bebés y llenarla con un poco de agua fresca. No pongas demasiada agua, ya que nuestro gato tiene que poder hacer pie en la piscina y encontrarse cómodo y seguro en ella.
Y por supuesto, aunque parezca obvio, NUNCA lo dejes solo en el coche
Si este verano planeas viajar con tu gato, recuerda que incluso a la sombra, la temperatura dentro de un coche puede llegar a subir de forma muy rápida y peligrosa. Así que si vas a viajar con tu felino procura hacerlo en las horas más frescas, asegurándole agua fresca y las paradas necesarias por el camino.
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